CPA FERRERE
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Más allá de octubre: perspectivas económicas y escenario político de cara al 2025

El pasado miércoles 9 de octubre se realizó la reunión trimestral para los clientes del Servicios de Análisis y Pronósticos Económicos de CPA FERRERE. En esta ocasión, en el marco de la coyuntura electoral, la actividad contó con la participación especial de Ignacio Zuasnabar, director de Equipos Consultores, que analizó las perspectivas de intención de voto y el escenario de cara al plebiscito de la seguridad social. El economista Alfonso Capurro, socio de CPA FERRERE, presentó el escenario económico y las prioridades de la agenda para la próxima administración de gobierno. 
 
Una elección competitiva. Zuasnabar destacó que el escenario electoral de octubre está pautado por una elección competitiva. Por un lado, la oposición política cuenta con ventaja en materia de intención de voto. En efecto, la intención de voto del Frente Amplio se ubicó en 43% en la encuesta de Equipos Consultores de setiembre y la historia reciente muestra que el Frente Amplio triunfó en todas las elecciones en las que la intención de voto superó el 40% (2004, 2009 y 2014). Por otro lado, las variables de humor social muestran un escenario más favorable al escenario de continuidad de gobierno de la Coalición Multicolor: satisfacción media con el rumbo del país, confianza del consumidor en terreno positivo (+13 puntos) y altos niveles de aprobación del presidente y del gobierno. La historia reciente muestra que los escenarios con indicadores positivos de humor social derivaron en continuidad política (2009 y 2014). Por este motivo, se trata de una elección con alto nivel de incertidumbre, en la que una de estas dos reglas se romperá: o el Frente Amplio pierde la elección con una intención de voto mayor al 40% o el gobierno pierde la elección con aprobación mayor al 40%.  
 
Respecto al plebiscito de la seguridad social, Zuasnabar afirmó que los niveles de adhesión se han reducido en las últimas mediciones, cayendo del 36% en julio a 31% en la encuesta de setiembre, al tiempo que aumentó el rechazo (39% en setiembre). Sin embargo, el escenario continúa marcado por un elevado nivel de desinformación: 30% de los encuestados no tiene posición definida a un mes de las elecciones; 20% de los encuestados no escuchó hablar del tema y 36% escuchó hablar pero no tiene una idea clara. En síntesis, Zuasnabar sostuvo que el plebiscito tiene más probabilidades de rechazarse que de aprobarse, pero la alta desinformación mantiene la incertidumbre, en particular ante un eventual escenario de polarización en la recta final de la campaña que puede afectar la opinión de los indecisos. 
 
Tres señales positivas en el escenario internacional. Capurro destacó que la línea base no es favorable por el bajo crecimiento internacional, las tasas altas y la inestabilidad regional. Sin embargo, destacó que hay tres novedades recientes que podrían traer mejoras del ciclo externo de cara al 2025. En primer lugar, la Reserva Federal de los EEUU comenzó su ciclo de recorte de tasas de interés y se espera una rebaja de 200 puntos básicos al cierre de 2025, que operará como un estímulo a la demanda agregada a nivel global y un relajamiento de las condiciones financieras. En segundo lugar, China desplegó un paquete de estímulos monetarios sin precedentes desde 2008 con el objetivo de retomar una senda de crecimiento del 5% anual, medida que favorece la demanda agregada y es una señal positiva para países exportadores de materias primas como Uruguay. En tercer lugar, Argentina consolida un nuevo equilibrio de precios y la actividad se encuentra en fase de rebote, por lo que dejó de ser una fuente de inestabilidad para la economía uruguaya y podría ser incluso un shock un positivo para Uruguay en 2025. 
 
URUGUAY RUMBO AL 2025: fortalezas, restricciones y margen de maniobra. El bajo crecimiento de la economía uruguaya (1,2% anual en la última década) es una debilidad de cara al 2025. Por este motivo, la próxima administración necesita impulsar reformas y políticas orientas a estimular el crecimiento. Adicionalmente, el frente fiscal será una restricción para el próximo gobierno, que deberá promover una reducción del déficit fiscal del orden de 1% a 1,5% del PIB. Capurro destacó además que el sector exportador está en un “equilibrio malo” de precios bajos y costos de producción elevados, equilibrio que condiciona el crecimiento y tensiona el sistema de precios. En ausencia de una corrección, la inercia rumbo al 2025 cierra con menos producción, inversión y empleo. Sin embargo, promover una corrección con depreciación del peso pondría en riesgo la inflación dentro del rango meta, un logro que se ha materializado en los últimos meses y que todos los partidos políticos se han comprometido a defender. Descomprimir la ecuación del sector exportador y mantener la inflación dentro del rango meta requiere implementar una agenda de reformas para promover eficiencia de costos y desindexar la economía para reducir costos de políticas desinflacionarias. 
 
En los próximos meses, una vez elegido y conformado el próximo gobierno, se conocerá con mayor claridad la agenda de reformas y los pilares del programa económico. La economía política de estas reformas es compleja, por lo que su factibilidad depende de factores como la conformación de mayorías parlamentarias y de la fragmentación política. A su vez, la credibilidad del programa económico dependerá también de la consistencia entre los compromisos políticos asumidos, las necesidades de financiamiento para llevarlos a cabo, el crecimiento económico, el programa fiscal y los objetivos de inflación trazados por las nuevas autoridades.